Festividad de Santa Teresa de Jesús Jornet e Ibars

Oh Dios, que has guiado a la Virgen Santa Teresa a la perfecta caridad en el cuidado de los ancianos, concédenos a ejemplo suyo, servir a Cristo en el prójimo para ser testimonios de tu amor. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.

Madre Teresa de Jesús Jornet

-Fundadora de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados-

«No olvides que Jesús vino al mundo no en palacios ni entre riquezas, sino al lugar más humilde y pobre; ¿quién no se animará a sufrir la pobreza?» Así hablaba la madre Teresa de Jesús Jornet Ibars, que dedicó toda su vida a remediar el abandono y la miseria en que muchísimos ancianos se encuentran los años últimos de sus vidas. Su tesón prodigioso y su incansable celo en servir a Dios la llevaron a buscar sin descanso el lugar que Él le tenía reservada como campo de acción. Nacida en Aytona (Lérida) el 9 de enero de 1843, la Madre Teresa de Jesús Jornet pasó primero por las Hermanas Carmelitas Terciarias en unos años difíciles para la Religión en España, en la segunda mitad del siglo pasado. Era una época en que las Carmelitas hablan de dedicarse a obras externas de beneficencia y de enseñanza para encubrir su auténtica vida de personas dedicadas a la oración. La imposibilidad de existir Conventos en España, venía a hacer más fuerte, si cabe, la vocación de muchas almas deseosas de entregar sus esfuerzos a la causa de Dios. Después también en el decenio 1862-72, Teresa de Jesús Jornet Ibars ingresó en las Clarisas de Briviesca (Burgos) donde hizo el noviciado y fue encargada de la enseñanza de niñas como Maestra que era en la vida civil. Tampoco aquí le fue posible emitir los votos de su profesión religiosa, parte por impedirlo las disposiciones de aquellos tiempos difíciles para la iglesia y parte por una enfermedad.

Objetivo: Los ancianos

Al fin encontró el puesto que Dios le tenía reservado. En un encuentro con don Pedro Llacera, encargado en aquellos días con los preparativos de una Congregación española de refugio y consuelo de los ancianos y desvalidos. A las primeras palabras supo que aquél era su sitio. Volvió a Aytona sólo para despedirse de la familia y para aumentar en este mismo momento el número de vocaciones: su hermana María y una amiga, Mercedes Calzada. La madre Teresa de Jesús que durante el resto de su vida, desde la primera elección el 31 de enero de 1873 habría de ser Directora General de la Congregación, no dejó nunca de recordar a sus Hermanitas cómo la Caridad era la clave de su misión: »Cuiden con esmero a los ancianos, téngase mucha caridad y observen fielmente las Constituciones: en eso está nuestra santificación». Los veinticinco años que rigió la Congregación hasta su muerte en 1897, fueron años de intensa actividad increíble casi para una persona que estuvo siempre seriamente enferma y que, sin embargo, viajó constantemente por España en que la quietud no era lo frecuente, y con unos medios de locomoción lentos y molestos. Así pudo dar vida a las 103 Casas-Asilos de España y América que junto con 1.260 monjas, de las que a su muerte vivían 883, eran el balance de una existencia fecundísima en el servicio del Señor.

Obras son amores

«Que conozcan los ancianos y enfermos sus buenos deseos por las obras, porque el verdadero amor las obras lo hacen. Sean a la vez diligentes, cuidadosas y caritativas». De esta forma, indicó la fundadora cómo debían las monjas vivir su existencia dedicada a Dios, haciendo felices y preparando para la hora de la muerte a tantos seres confiados a ella. La Sagrada Congregación de Ritos ha concedido el «tuto» por el que se reconocen los milagros obtenidos por intercesión de la Madre Teresa de Jesús y el 27 de abril se celebró la ceremonia de beatificación en la Basílica de San Pedro. La Orden por ella creada cuenta en la actualidad con 205 casas en España, Cuba, Méjico, Argentina, Colombia, Chile, Ecuador, Perú, Puerto Rico, Venezuela, Brasil y República Dominicana. El número de ancianos acogidos asciende hoy a 17.500. Como se ve, los años graves que ella empleó en consolidar la obra han dado magnífico fruto.

Revista Betania: Órgano diocesano de la rama de mujeres de Acción Católica, 1 de junio de 1958.

Fuente: jable.ulpgc.es