Novena a Nuestra Señora del Rosario

Virgen del Rosario ruega por nosotros

Una novena en busca de consuelo. En los últimos tiempos asistimos al desmoronamiento de nuestra sociedad: pérdida de valores morales; familias rotas y tristes; personas irreconocibles, irascibles, desilusionadas, sin esperanza…Rezemos a la virgen María, la mujer más buena y hermosa que jamás haya existido. Porque ella como buena madre no nos olvida.

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San Martín de Porres en África

saint martin de porres parish (Lukome, Gulu - Uganda)

Saint Martin de Porres Parish (Lukome, Gulu – Uganda)

SMP Hospital Eikwe GHANA

St. Martín de Porres Hospital (Eikwe – Ghana)

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St. Martín de Porres Hospital (Eikwe – Ghana)

centro hospitalario dominicano SMP - Camerún

Centro Hospitalario Dominicano Saint Martin de Porres (Mvog Betsi, Yaundé – Camerún)

Hospital Agomanya Ghana

  Saint Martin de Porres Hospital (Agomanya – Ghana)

ST.MARTIN DE PORRES CHURCH, MBUNGONI-MOMBASA, KENYA

 Saint Martin de Porres Church (Mbungoni, Mombasa – Kenya)

SUDÁFRICA East London South Africa

 St. Martin de Porres Catholic Church (East London – República de Sudáfrica)

La devoción a San Martín de Porres no se hizo popular hasta años después de la llegada de los primeros dominicos a África. Si bien es cierto que desde muy pronto comenzaron, poquito a poco, a propagar la devoción al en aquel entonces Beato y Bienaventurado mulato. Llegando a finales de los 40 y principios de los 50 es realmente cuando empieza a ser más conocido y apreciado. Con el transcurso del tiempo, familias paganas convertidas al catolicismo lo invocan para obtener algún favor espiritual o material; e incluso grupos de mujeres oriundas de varias tribus comenzaron a formar parte de pequeñas congregaciones religiosas, tomando algunas de estas humildes órdenes el nombre de Fray Martín de Porres.

San Martín de Porres es un santo muy querido entre los africanos; le tienen una devoción especial. Corría por las venas de Martín, el santo mulato de Perú, la sangre de los esclavos africanos. El alma de Martín nunca dejó de ser africana, pues su vida llevaba dentro de sí la historia de sus antepasados. Además, hijo de mujer negra, era mulato: y, siendo de piel obscura, le consideran uno de los suyos. Se sienten contentos de ver que la iglesia católica venera como santo a uno de su color. Y ello les anima a procurar vivir según los mandamientos de la Ley de Dios.

Aun así la esencia y el sentido a la devoción a San Martín de Porres no debemos reducirlo a una mera cuestión de color de su piel, el lugar de su nacimiento ni de sus ancestros -sus antepasados por parte de su madre, aunque negra panameña, procedían de este continente, parece ser que de Senegal-. Debemos interpretar este fervor con una mirada más profunda: El espíritu de servicio de Fray Martín, a poco que lo busquemos, se encuentra presente en aquellos lugares donde se le necesita; y cómo no, también en África, un lugar con altos niveles de pobreza y tremendas injusticias sociales. Por eso su amor es desbordante y universal. Leyendo algunas de sus biografías se menciona el hecho de que fue visto ayudando en el continente africano por medio de uno de sus dones, la bilocación; consolando, llevando remedio y paz a los más sufridos cual Cristo viviente. Ahí encontramos una de sus grandezas: sin viajar «físicamente» llegó a tierras lejanas con su ejemplo de humildad, caridad y servicio. Precisamente de vivir en nuestros días, en nuestro tiempo, el Continente Africano sería su destino y misión preferida: ejercitando la caridad, sufriendo, desviviéndose por los más desfavorecidos y por su amor a Jesús Sacramentado. Su luz irradia actualmente en hospitales, centros educativos, orfanatos y parroquias de Ghana, Kenia, Senegal, Camerún, República del Congo, República de Sudáfrica, etc. Algunos llevan, a modo de tierno homenaje, el nombre de San Martín de Porres; como por ejemplo, el Centro Hospitalario Dominicano San Martín de Porres, en un barrio pobre de Yaundé (capital de Camerún), y cuya directora, la dominica ¹Sor Cristina Antolín, O.P., ejerce su profesión como médico general, ginecóloga, misionera…misioneros españoles de los que tan orgullosos nos sentimos y que nos hace comprender que el amor de Jesús no nos abandona nunca.

África y San Martín tienen algo que les hace común: SON AUTÉNTICOS EJEMPLOS DE VIDA Y DE GRANDEZA ESPIRITUAL.

¹Entrevista de la periodista Julia Otero a la misionera Sor Cristina Antolín Tomás, médica cirujana y dominica de la Congregación Santo Domingo en Camerún CLICK AQUÍ

Cerámica con la imagen de San Martín de Porres (II)

Azulejo del pintor ceramista Facundo Peláez Jaén. Dicho azulejo, de mediados de la década de 1960, procede de la prestigiosa fábrica Cerámica Santa Ana (Sevilla), y se encuentra ubicado en la Capilla de Montserrat, en la calle Cristo del Calvario (Sevilla).

Años antes se había entronizado en el interior de la iglesia una imagen del Santo, que tanta devoción recibió a mediados del siglo XX, acordándose posteriormente colocar un retablo en la fachada, con un limosnero en su parte inferior (Martín C. Palomo García).

Fotos: Antonio Entrena Aznarte y Alfonso García García

Fuente: retabloceramico.net

Festividad de San Juan Macías, el gran amigo de Fray Martín

San Martín de Porres y San Juan Macías

Pintura anónima del S. XVII que representa a San Juan Macías y a San Martín de Porres

Juan de Arcas Sánchez, San Juan Macías, O.P., el gran amigo y confidente de San Martín de Porres. Amigos íntimos en vida habría que destacar la coetaneidad de ambos santos: San Martín en el convento del Rosario, San Juan en el de la Magdalena. Martín debió de ver en Juan, al hombre que sólo Juan era; al hombre ensoñecido y ensimismado, al pastor de ovejas y luceros, al «raro». Los dos cooperaban en socorrer a pobres y enfermos, y se ejercitaban intensamente en la caridad para con sus hermanos. También en ocasiones gustaban de orar juntos, y especialmente en el caso de Juan, buscando la salvación de las almas del purgatorio. Juan deslumbró a todos con su derroche de amor, caridad, paz y dones taumatúrgicos hacia los demás. Efectuada su profesión religiosa, se sintió plenamente poseído de Dios, y se mostró último en humildad, limpísimo en castidad, obediente sin límites, devotísimo de la Eucaristía y de la Pasión de Cristo. Sus restos descansan junto a los de su gran amigo San Martín de Porres y a los de Santa Rosa de Lima, en el altar de los santos peruanos en Lima, concretamente en la Basílica del Rosario. Beatificado por Gregorio XVi en 1837, el 28 de Septiembre de 1975 fue canonizado por Pablo VI. La iglesia Católica celebra su festividad el 16 de Septiembre (la orden dominica conmemora su fiesta el 18 de Septiembre)

Estandarte de la beatificación de San Juan Macias (1837)

Semblanza espiritual de Fray Juan Macías, O.P.

Desde niño era muy modesto y amigo de las cosas religiosas, frecuentaba las iglesias y oía con gran atención los sermones, que a su manera contaba a otros niños. Atendiendo la portería con humildad, San Juan Macías procuró ocultar siempre la estimación que de su santidad hacían todos, dentro y fuera del convento, lo mismo los grandes señores que los pobres a quienes en la portería daba sustento. Teníase por indigno de tratar con los demás religiosos, estimando no solamente a los sacerdotes, sino también a los novicios y conversos como si cada uno fuera su superior. Las reprensiones las llevaba con mucha paz sintiéndose mortificado cuando era alabado.

Su obediencia era tan pronta que, sin formar juicio de lo que le mandaban, inmediatamente lo cumplía. Bastaba con que el superior le hiciese la más mínima señal o indicación para dejar hasta los mismos ejercicios espirituales y hacer lo que le mandaban.

Su caridad con los pobres fue grande en socorrerlos y consolarlos, para lo cual se daban ayuda los nobles de la ciudad y de otras partes. En cada pobre veía a Jesucristo. Socorría a todos, en su portería o enviando un criado a las familias necesitadas. Esta caridad que con los pobres ejercitaba, dándoles limosna, la ejercitaba también con los ricos aconsejándoles y consolándolos.

Parroquia San Juan Macías - Cáceres 1

Parroquia de San Juan Macías (Cáceres – España)

Oración

Bendito, alabado y glorificado seas por siempre, Oh Dios Todopoderoso y Padre amorosísimo de todas las almas, y muy en particular de las que gimen, abandonadas, en este valle de lágrimas y miserias, como lo demostrásteis con vuestro siervo y abogado mío, el Santo Juan Macías, dándole por visible guía al discípulo amado San Juan Evangelista. Yo os suplico me concedáis el favor que os pido por esta oración, si es para vuestra mayor gloria y bien de mi alma. Amén

Carlo Maria Martini. In Memoriam

Tu palabra es la lámpara de mis pasos

El cardenal Carlo Maria Martini, arzobispo de Milán durante 22 años, era un hombre bueno y santo, un creyente libre y un soñador de una iglesia dialogante con el mundo. Se distinguió por una pasión, fue un amante y enamorado de la Palabra de Dios. Pasión que vivió y transmitió a lo largo de su vida. Durante el cónclave de 2005 su nombre sonó con alguna fuerza, en el sector más progresista y renovador de la iglesia, para suceder a Juan Pablo II. Benedicto XVI refiriéndose a él dijo: «fue un hombre de Dios, que no sólo estudió la Sagrada Escritura, sino que la amó intensamente y la convirtió en la luz de su vida». El pasado 31 de Agosto fallecía a la edad de 85 años, dejando detrás de sí numerosísimos libros y el ejemplo de una vida de amor y de seguimiento a Jesús de Nazaret. Descanse en paz