El espejo de agua

El espejo de agua

Mi espejo, corriente por las noches,
Se hace arroyo y se aleja de mi cuarto.

Mi espejo, más profundo que el orbe
Donde todos los cisnes se ahogaron.

Es un estanque verde en la muralla
Y en medio duerme tu desnudez anclada.

Sobre sus olas, bajo cielos sonámbulos,
Mis ensueños se alejan como barcos.
De pie en la popa siempre me veréis cantando.

Una rosa secreta se hincha en mi pecho
Y un ruiseñor ebrio aletea en mi dedo.

Vicente Huidobro

En paz

En paz

Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo, vida,
porque nunca me diste ni esperanza fallida,
ni trabajos injustos, ni pena inmerecida;

porque veo al final de mi rudo camino
que yo fui el arquitecto de mi propio destino;

que si extraje las mieles o la hiel de las cosas,
fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas:
cuando planté rosales, coseché siempre rosas.

…Cierto, a mis lozanías va a seguir el invierno:
¡mas tú no me dijiste que mayo fuese eterno!

Hallé sin duda largas las noches de mis penas;
mas no me prometiste tan sólo noches buenas;
y en cambio tuve algunas santamente serenas…

Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.
¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!

Amado Nervo

Dios que me da…

DIOS QUE ME DA…

Dios que me da
el beleño por la noche,
el azafrán por el día,
el cantueso por la tarde.
Dios que me da,
tu presencia en el sueño,
el amor para el hambre,
la muerte para el cuerpo,
la vida para el alma,
jabón para lavarme.
Y yo le doy,
pellizcos a sus manos,
disgustos a sus curas,
y le pago con deudas.
Dios me da demasiado.
Dejadme que esta noche me horrorice.

Gloria Fuertes, de «Aconsejo beber hilo».

En el principio de todo

En el principio de todo

En el principio de todo
cuando la tierra no era,
era en el seno del Padre
la Palabra Verdadera.

Y dijo Dios poderoso,
amando, palabras ciertas,
y fue la luz y fue el hombre,
y en el hombre era su huella.

Vino la Nube al desierto,
se hizo la voz al Profeta;
pregunta si un pueblo tuvo
sus dioses nunca tan cerca.

Pero la Voz amorosa
se ha hecho carne concreta,
y entre nosotros el Verbo
hoy ha clavado su tienda.

Hoy nace humana la Gloria,
cobijada en una cueva;
hoy pisa historia sangrienta
la Paz que del cielo llega.

Da fruto la rama virgen,
María de gracia llena;
ungidos del amor divino
por ella los hombres quedan.

Adoremos, alabemos
la ternura y la grandeza.
¡Gloria a ti, Dios encarnado,
gloria a Dios, paz en la tierra!

Amén.

Rufino Grandez

El regalo que yo quiero

El regalo que yo quiero

Yo no deseo un regalo
que se compre con dinero.
He de pedir a los Reyes
algo que aquí no tengo:
pido dones de alegría
y la canción de un jilguero,
y la flor de la esperanza
y una fe que venza al miedo.
Pido un corazón grande muy grande
para amar al mundo entero.

Yo pido a los Reyes Magos
las cosas que hay en el cielo:
un vestido de ternura,
una cascada de besos,
la hermosura de los ángeles,
sus villancicos y versos,
y una sonrisa del Niño.
El regalo que yo quiero…

Gloria Fuertes