Cuando, Señor, en quieta lotananza
se encienden los fulgores de este día,
no dejes avivar nuestra esperanza,
atiende al corazón que en ti confía.
♥
Van a pasar por manos laboriosas
los granos de un rosario de ilusiones,
acógelas, Señor, que son hermosas,
amor y don de nuestros corazones.
♥
Mujer llena de Dios, Oh Santa Rosa,
vivir para el Señor, para el Amado,
fue el ansia de tu amor, gracia divina,
llevada de su fuerza y de su mano.
♥
No olvides los que vamos de camino
siguiendo en el desierto de tus pisadas,
aboga ante el Señor favor divino,
seguir como seguiste sus llamadas.
♥
Proclamen nuestros labios la grandeza
del Padre que en el Hijo nos dio gozo,
y, siendo nuestra herencia la pobreza,
nos colma de su amor el fuego Santo.
Amén.
Gloriosa Santa Rosa de Lima, tú que supiste lo que es amar a Jesús con un corazón tan fino y generoso, enséñanos tus grandes virtudes para que, siguiendo tu ejemplo, podamos gozar de tu protección en la tierra y de tu compañía en el cielo. Amén.
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